ESPAÑA, UNA CITA CON LA HISTORIA

Lo confieso, cuando llega un Mundial mi cuerpo experimenta extraños cambios, mutaciones diría yo. Se me afina el morro, se me erizan los pelos, mi voz se agrava, las pulsaciones me aumentan, la sangre intensifica su color, incluso me dan ganas de pintarme...la cara, se entiende.

Mi primer gran recuerdo de los mundiales data del año 1986, ya que el hecho de que me hiciera la colección de cromos del Mundial de Naranjito creo que no cuenta. Pues bien, el del 86 fue el Mundial de Butragueño y su gran noche de Queretaro. El Buitre consiguió 4 goles mágicos contra Dinamarca en una tarde para el recuerdo. Ahora entiendo porqué mi padre me arrastró fuera de la playa  y me llevó, sin apenas quitarme la arena, unos 15 km de caravana y calor infernal para no perdernos el partido. Pero en Méjico también empezó la historia de desgracias mundialistas para España. El jugador del Sporting de Gijón Eloy, falló el penalty decisivo contra Bélgica y España se quedó sin Mundial y de paso sin nachos.

El Mundial del 1990 fue el de Italia y se hizo famoso por la celebre imagen de Michel celebrando su tercer gol contra Korea al grito de "me lo merezco, me lo merezco". Pero los que no nos lo merecíamos fuimos nosotros, cayendo contra la Yugoslavia de Stojkovic en la prórroga. Otra vez los malditos cuartos nos mandaban para casa.

Estados Unidos fue el país elegido para albergar la edición del 1994. La selección del polémico Clemente hizo un Mundial magnífico, donde destacaban Hierro y Caminero. Nunca olvidaré el partido contra Italia. Un minuto antes de que Baggio marcara el gol decisivo, el patán de Julio Salinas tuvo un gol clarisimo que erró tirando al muñeco. Recuerdo que del salto de rabia que dí me cargué un sofá. El gol de Italia no lo pude ver, todavía estaba siendo perseguido por mi madre. Y luego llegó el codazo de Tassoti que partió la nariz de Luis Enrique, y el alma de España. Curioso, aquel día coloqué a Tassoti en la diana de mi habitación por lo que hizo a Luis Enrique. Años más tarde también lo colgué en la diana, pero esta vez por lo que no le hizo...

El Mundial de Francia del 1998 fue el más decepcionante para mi. Clemente se empeñó en poner a Zubizarreta en la portería y este se lo agradeció con el autogol más triste de nuestra historia. La goledada de la impotencia ante Bulgaria (6-1) no sirvió para nada; Nigeria y Paraguay pasaron de ronda y España volvió a cruzar los Pirineos.

La maldición de cuartos continuó en el 2002, la selección anfitriona de Korea capitaneada por el colegiado egipcio Al Gandour evitó que la selección de Camacho hiciera historia. España cayó en los penatys, Joaquín hizo de Eloy y España hizo de España; otra vez al hoyo.

Alemania 2006 parecía un lugar propicio para cambiar la historia. Teníamos una buena generación de veteranos y jóvenes pero cometimos el error de menospreciar a la vieja Francia del gran Zidane. El héroe de Glasgow y un joven Ribery se bastaron para eliminarnos; en cuartos, por su puesto.

Y por fin llegamos a la actualidad, año 2010; lugar, Sudáfrica. Desde aquel año 1986 nos han vendido muchisimas motos, y yo siempre las compré todas. Pero llegaba el Mundial y el miedo y el victimismo nos podía. Ahora es distinto, es España la que da miedo y ahora ya no compramos motos, las hacemos. No debemos pensar que está todo hecho, pero no podemos obviar que somos el mejor equipo del Mundo. Tenemos los mejores jugadores de nuestra historia, un seleccionador ejemplar, rompimos el gafe de cuartos en la Eurocopa con Italia, jugamos de cine, por lo tanto, sí!!nos toca!!!.

Asi, que por Eloy, por Michel, por la nariz de Luis Enrique, por Zubi, por Joaquín, por la camisa sudada de Camacho, por Raúl y por todos nosotros, VOLVED CON ELLA!!!!!